#VayaPorDios La religión del amor al prójimo necesita tener zonas de seguridad donde no pueda ejercer su precepto de amar al prójimo como a ti mismo (que creo que ahí es donde está el fallo).
Mira qué curioso que no hacen cosas así cuando se trata de echar a la basura a otros prójimos (con otros tonos de piel) por parte del fascio de turno.