Hace años empecé con pocket porque "venía" con firefox y descubrí que era un maldito timo porque terminabas por acumular miles (literalmente) de lecturas que no se reducían nunca y que te creaban ansiedad. Curioso que con los libros en papel eso no me pasa; será porque adornan mi vida, no sé.

En cualquiera de las dos herramientas (y supongo que no serán las únicas) el mayor problema que tenían era con las propias páginas web, una enorme parte de ellas diseñadas para NO compartir información y para NO leer con comodidad y mucho menos fuera de ellas, por lo que en ocasiones era imposible recoger el contenido y se limitaban a registrar la URL. URL que, por supuesto, desaparecía o se trasladaba o volvía a estar bajo un muro de pago que antes no o ... La internet moderna de los mercaderes: basura.

El caso es que cuando apareció wallabag -y teniendo dos servidores alquilados en la red- me pareció buena idea pasarme a él y alojarlo en ellos. Luego pensé que pedían muy poco y que estaría bien pagarles a ellos por una cuenta y así contribuir.

Lo usé durante un tiempo más, importando mi contenido de pocket, y alcancé inmediatamente el status anterior: montañas de páginas web superinteresantes pendientes de leer. Otro autoengaño.

Cuando descubrí que wallbag está diseñado para importar pero no para exportar me sentí ciertamente engañado y me dije que hasta ahí llegaba y que pasaba de ellos y me iba con pocket.

Eso fue el mes pasado.

Así que ahora no tengo claro qué hacer. Puedo usar la aplicación de marcadores de Nextcloud, que para eso tengo el montaje, o intentar encontrar algo nuevo que prometa guardar páginas y clasificarlas y organizarlas y ... termine empleando un LLM para darte la información.

Y yo muertito de angustia porque todo ese conocimiento vital para lo que fuese en ese momento mi vida no estará a mi alcance. 😞